Primeros pasos en la Creación de Marca para Negocios Gastronómicos

Una marca no es un logotipo, por lo regular lo vemos como sinónimo, pero está muy alejado de la realidad.

El logotipo es una representación gráfica del nombre comercial de una empresa. Las formas geométricas, los colores y sus proporciones hacen que los consumidores reconozcan visualmente a la empresa.

Por otro lado, la marca es la construcción de percepciones en la mente del consumidor gracias a las estrategias de comunicación, producto y puntos de contacto de esta relación bidireccional. En pocas palabras, la marca se construye en la mente de los consumidores gracias a la gestión correcta de la comunicación, el producto y sus experiencias.

Cuando pensamos en una marca que nos gusta, automáticamente somos contagiados de un sinfín de emociones, muchas veces sin ni siquiera pensar en el producto. Nos centramos en lo que sentimos: pertenencia, seguridad, autorrealización, bienestar, alegría, etc. Esto se debe a que al construir una marca, lo que realmente se está haciendo es alinear nuestro propósito y valores a los deseos y emociones de nuestros consumidores.

Hoy en día, si quieres construir tu marca, necesitas saber que para ser “La Opción” para los consumidores debes reflejar y transmitir mucho más que solo los beneficios de tu producto, precio o características. Debes defender y luchar por algo más grande, abrazar causas, propósitos con los cuales tus clientes se sientan conectados.

Es por eso la importancia de tener claro tu propósito, misión, visión y valores que reflejen lo que tú, como dueño del negocio, crees y deseas mejorar en tu cliente, en la sociedad o en tu industria, entendiendo que tu restaurante es solo el vehículo por el cual llegarás a lograrlo.

El propósito o declaración de misión de tu restaurante es un componente crucial de la identidad de marca, es un reflejo de ti, de tus valores que guían tu día a día y que transmites a tus clientes y empleados.

No tener un propósito y declaración de misión te dejará sin la oportunidad de conectar con la gente; estarás navegando sin rumbo y todo lo que intentes hacer será aleatorio, por moda o capricho. Espero que puedas ver la importancia; cuando tienes bien definidos todos estos conceptos se te abre un mundo de posibilidades, de tener un rumbo que te da seguridad en tus acciones, conectas con mayor facilidad y encuentras sentido a todo lo que haces.

Muchas empresas a la hora de crear la marca para su negocio gastronómico comienzan con la pregunta ¿qué puedo hacer para hacer mas fácil la vida de los clientes y de nuestros colaboradores? ¿Qué pueden hacer por la comunidad a la que pertenecen? Que me inspira todos los días para trabajar y ser mejor.

Starbucks se propuso ser una empresa diferente. Una empresa donde no solo se honrase al café y a su rica tradición, sino donde también se crease una sensación de conexión. Su misión: inspirar y nutrir el espíritu humano. Una persona, una taza de café y una comunidad a la vez.

Momo Mee: “Volviendo a lo básico. Conectando sabores de Asia con la comunidad a través de tradiciones culinarias y cultura.”

Grupo de Restaurantes Panda: “Ofrecer experiencias gastronómicas asiáticas excepcionales mediante la creación de una organización en la que las personas se sientan inspiradas para mejorar sus vidas”.

Como puedes ver en cada una existe algo más allá de solo servir comida, se trata de entender a nuestro consumidor y que nuestra labor diaria nos ayude a todos a ser mejores.

Mi propósito:
Creo firmemente que cuando uno hace lo que le apasiona se convierte en un mejor ser humano, somos más felices y nos permite ser sensibles de entender y ayudar a otros para mejorar. Es por eso que ayudo a emprendedores a vivir de su pasión, transmitiendo su emoción y el valor de sus servicios a través del marketing.

Las declaraciones de misión a menudo se combinan con una visión y/o valores. Por esta razón, los tres términos a menudo se confunden y se usan indistintamente. No obstante, la misión, la visión y los valores son tres componentes distintos y deben tratarse como tales.

Una vez tengas claro tu propósito, misión, visión y valores, pregúntate si el logotipo que tienes actualmente representa lo que quieres comunicar. Nunca es demasiado tarde de hacer los cambios que te ayuden a comunicar y conectar con tu cliente.

Recuerda que un logotipo es un símbolo que representa la misión de tu empresa, unifica a todos tus colaboradores y vincula a tus clientes mediante tus valores y experiencias.

Cuando un logotipo está bien diseñado se convierte en un estandarte que inspira y alienta a construir algo mucho más grande que un producto, así de importante es.

Construir tu marca va más allá de solo mandar a diseñar un logotipo, tu marca representa la filosofía, los valores y todo lo que te inspira a levantarte todos los días de la cama para luchar por un propósito más grande que tú.

La marca es el puente con el cual te vinculas con tus clientes, generarán una comunidad que esté dispuesta a defenderte, hablar de ti y ayudarte a crecer porque serán vistos como uno solo.

Construye tu marca y cambiarás la vida de las personas y la propia.